sábado, 8 de noviembre de 2014

Agencias malas 1

A veces, esto de las agencias es como un campo de minas. No sabes si el próximo paso que des será en falso y volarás en mil pedazos. BUM.




Igual como símil es un poco exagerado, pero se capta la idea. Hay muchas agencias en el mercado, e igual que es vox pópuli que alguna de ellas son LAS MEJORES, también hay otras que no hemos oído en nuestras vidas. Es un poco lotería aceptar un trabajo de una agencia que no conocemos por eso mismo. No puedes tener certeza de si vas a tener problemas, si te van a pagar a tiempo, o incluso si te van a pagar. El caso más representativo, creo yo, es cierta agencia de cuyo nombre no quiero acordarme, pero que empezaba por V y terminaba por N. Hoy en día no existe, pero dejó a deber pasta a decenas de azafatas.

¿Qué puedes hacer tú para identificar una agencia mala?


  Primero, busca información de la agencia que no conoces pero que te ha ofrecido curro. Que tenga web propia, página de Facebook, que puedas encontrar con suerte opiniones de otras azafatas... todo eso puede ayudarte a hacerte una idea de si la agencia es seria.

  Después, la agencia debe SIEMPRE pedirte el número de la Seguridad Social, porque es obligatorio para cualquier empresa dar de alta a sus currantes. Si el trabajo es sólo de unas horas, no es necesario que firmes contrato, pero sí lo es que te den de alta. Esa es una de las pruebas de que efectivamente has trabajado, si no, es trabajo en negro y ni cotizas ni hostias. Y eso no nos conviene, queridas.
¿Cómo sabes si te dan de alta? Yo fui a la oficina de la seguridad social y activé un servicio muy útil: me llega un sms cada vez que una empresa me da de alta o de baja. Y además, puedo ver toda mi vida laboral por Internet siempre que quiera. Si no quieres modernizarte, te llegará una carta con tu vida laboral poco después de que la empresa haya cumplido sus trámites.
Algunas agencias pagan por cheque y otras por transferencia, así que lo suyo es que también te pidan tu cuenta corriente o tu dirección.

   Otra cosa muy obvia es que no te pidan dinero. Me acuerdo que una vez me llegó un email de una agencia que decía que me contrataba de azafata para un Congreso, pero que por no sé qué tenía que ingresar YO 90 euros a una cuenta (y venía la cuenta en números bien grandes en el email) y que después me los devolverían. ¿Huele mal? Sí, huele muy mal.
Otra cosa es que algunas veces, haciendo una promo, la agencia te diga que compres, por ejemplo, hielo para hacer las degustaciones de una bebida. La agencia te habrá dicho que guardes los tiques y luego ellas te lo pagan.

Luego, mírate a ver cuándo paga la agencia. ¿Sabes eso de que las nóminas se ingresan a mes vencido? Pues aquí no. Hay agencias que te pagan a los 90 días, otras el jueves siguiente del mes que hayas trabajado, otras cuando les da la gana...  si no te lo han especificado, pregunta.

Y otro día sigo con temas legales, que por otro lado, son mis favoritos.

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